ENCONTRAR LO QUE SE BUSCA
Una frase de vida dice: “El que no sabe lo que busca, no entiende lo que encuentra”. Muchas veces caminamos por la vida a ciegas. Sin saber exactamente qué queremos, hacia dónde vamos y lo que es peor, no sabemos a ciencia cierta, quiénes somos. Las razones son variadas: vivir a un ritmo demasiado acelerado; atender varias cuestiones al mismo tiempo; no disponer del tiempo de descanso adecuado; atender sin demoras a los requerimientos de las redes sociales; asumir demasiados compromisos… Para cuando nos percatamos de estar existiendo de este modo, empezamos a tomar conciencia de que fuimos perdiendo el rumbo; de que no encontramos el norte para nuestra vida y que, al levantarnos, lo hacemos como robot y no como una persona que tiene objetivos claros para su vida, que sabe quién es porque con sus actos y decisiones responde a sus principios humanos y morales y que, lo que hace, lo hace con pasión y por amor. Si por un instante nos detenemos y aunque sea por descuido, viajamo...